La fotografÃa puede ser un arte terrorÃfico, oscuro e inquietante: fotógrafos de terror
Se acerca Halloween, y nos apetece seguir disfrutando de la fotografÃa, esta vez con fotógrafos de terror. Ya escribimos anteriormente sobre los monstruos de las pelÃculas de terror. Hoy vamos a hablar de seis fotógrafos que se han vinculado de alguna manera con el mundo sobrenatural.
Joshua Hoffine
Es de los más conocidos entre los fotógrafos de terror. Originario de Kansas, EEUU y consagrado a este género tan oscuro e inexplorado. Su trabajo es producto de una escenificación muy elaborada, con disfraces, caracterización y efectos especiales, entre otros recursos. Y aunque sus trabajos son de lo más profesionales, entre los actores y su equipo nos puede sorprender alguna cara de sus familiares o amigos. Realizó una serie escalofriante de fotos que indagan en los monstruos y los miedos de la infancia. Hoffine afirma que el miedo es la emoción más primitiva y nunca lo perdemos, se queda en nuestro inconsciente. Él tiene una forma muy divertida de ver su trabajo: My role as a Horror photographer is to show you what you don’t want to see.
Seth Siro Anton
En sus fotografÃas, recrea escenas terrorÃficas, que según él mismo dice, trata de imitar el estado consciente de un sueño lúcido. Sus fotografÃas abren paso a reflexiones de aquello que nos aterroriza, un caos oscuro de ideas difÃcil de entender. Es un fotógrafo especializado en la fotografÃa de terror. De origen griego, ha realizado exposiciones en diferentes paÃses y cuenta con mucha experiencia en este género.
Michal Macku
Ha creado su propia técnica, a la que ha bautizado como Gellage, resultado de la unión entre collage y gelatina. Consiste en dar una forma nueva a una fotografÃa a partir de gelatina, un material transparente y sencillo de manipular. También realiza impresiones sobre carbón y combina esta técnica con el gellage. Este fotógrafo checo destina su creatividad a hacer fotografÃas curiosas, que representan la ansiedad, lo onÃrico y la muerte.
Miwa Yanagi
Fary Tales es el trabajo más terrorÃfico de la fotógrafa japonesa. Este trabajo en blanco y negro cuenta en su mayorÃa con el protagonismo de un hÃbrido entre niñas y ancianas. Lo que podrÃa ser una sutil metáfora de la confrontación entre la vida y la muerte. Las escenas que representan son tristes, lúgubres y singulares, sacadas de los cuentos de los hermanos Grimm. Un trabajo único entre las obras de Miwa Yanagi, en el que se muestra su mirada más oscura y simbólica.
Sally Mann
Fue premiada a la mejor fotógrafa estadounidense por el Times. Su obra no se ciñe al terror, pero también utiliza la fotografÃa en blanco y negro y el motivo de los niños, para conseguir un ambiente enigmático y oscuro. Su serie Immediate Family creó polémica, ya que en esta colección aparecen sus tres hijas, muchas veces desnudas y transmitiendo ideas como la soledad o la muerte.
Philippe Halsman
SÃ, el fotógrafo de Letonia, que hizo tantos retratos icónicos comos los de Dalà o Marilyn Monroe, también tiene trabajos inquietantes. En su pasado nos encontramos con que fue encarcelado por la acusación de haber matado a su padre, aunque no se demostró su culpabilidad. Pero muy a su pesar, el movimiento antisemita de entreguerras le sobrevino y sin prueba alguna, fue condenado a pasar unos años en prisión. Después se dedicó a vivir de la fotografÃa, desarrolló un estilo propio en el que congelaba el momento de los saltos, quedando como si estuvieran levitando misteriosamente, lo llamó jumpology. Indagó tanto en la psicologÃa, el surrealismo y la experimentación, que acabó haciendo creaciones un tanto oscuras y muy peculiares.Â
La fotografÃa de horror es un auténtico universo, complejo y lleno de enigmas. Hay fotógrafos de terror que, como hemos visto, se han especializado en este género tan fascinante. Por otro, lado hay muchos otros que dentro de un inmenso trabajo, podemos encontrar obras que rompen todos sus cánones y nos sorprenden con una súbita oscuridad.
Hacer Comentario